Geología
El elemento dominante en el núcleo terrestre
En las profundidades del núcleo de la Tierra yace un misterio que ha desconcertado a los científicos durante siglos: la composición de este reino inaccesible. Sin embargo, a través de investigaciones y estudios sísmicos, los expertos han llegado a una conclusión: el hierro es el elemento más común en el núcleo terrestre.
La Importancia del Hierro en el Núcleo Terrestre: El hierro es un elemento fundamental en la geología y la cosmoquímica, y desempeña un papel crucial en la formación y evolución de los planetas rocosos como la Tierra. En el caso del núcleo terrestre, se cree que el hierro es el componente principal tanto en el núcleo externo líquido como en el núcleo interno sólido, representando aproximadamente el 85% de su masa total.
Formación del Núcleo Terrestre: Durante la formación temprana de la Tierra, hace aproximadamente 4.500 millones de años, se produjo una diferenciación planetaria que separó los elementos más densos, como el hierro y el níquel, del resto del material. Estos elementos se hundieron hacia el centro del planeta, formando el núcleo terrestre y liberando energía en forma de calor en el proceso.
(Foto: Wikimedia Commons)
Estructura del Núcleo Terrestre: El núcleo terrestre se divide en dos regiones distintas: el núcleo externo líquido y el núcleo interno sólido. Se cree que el núcleo externo, que se extiende desde aproximadamente 2.900 km hasta 5.150 km de profundidad, consiste principalmente en hierro líquido en un estado de alta presión y temperatura. Mientras tanto, el núcleo interno, que se encuentra más profundamente, está compuesto principalmente de hierro sólido debido a las condiciones extremas de presión.
Importancia en la Dinámica del Planeta: El hierro en el núcleo terrestre desempeña un papel crucial en la generación del campo magnético de la Tierra. La convección del hierro líquido en el núcleo externo, combinada con la rotación del planeta, genera corrientes eléctricas que producen el campo magnético protector que rodea a la Tierra. Este campo magnético desempeña un papel vital en la protección de la atmósfera terrestre de la radiación solar dañina y en la orientación de las brújulas.