Astronáutica
Avanzan los preparativos para el retorno de astronautas a la Luna
Las próximas misiones del programa Artemis de la NASA enviarán a la primera mujer y a la primera persona de color a la región polar sur de la Luna, lo que supondrá el primer regreso de la humanidad a la superficie lunar en más de 50 años.
La primera misión Artemis, sin tripulación, duró 25 días y se llevó a cabo entre noviembre y diciembre de 2022. Una nave Orión, diseñada para albergar astronautas pero que en esta misión viajó sin tripulación, fue lanzada al espacio por un cohete SLS (Space Launch System) y sobrevoló la Luna. Y no solo eso. Se alejó del sistema Tierra-Luna, adentrándose un trecho en el espacio interplanetario, un territorio que ha estado vedado para el ser humano desde los inicios de la astronáutica, pero que, si los planes futuros del programa Artemis dan el resultado esperado, será surcado por seres humanos con destino a la superficie de Marte y quizá a otros lugares lejanos.
La misión Artemis 2, planeada para no antes de septiembre de 2025, será el primer vuelo de prueba con tripulación del cohete SLS y la nave Orión alrededor de la Luna. Durará unos 10 días y sus astronautas sobrevolarán nuestro satélite natural. El último sobrevuelo tripulado de la Luna se hizo en el marco del programa Apolo, que también incluyó aterrizajes en suelo lunar.
Esto último, posarse en la superficie de la Luna, es lo que se hará en la misión Artemis 3, prevista para no antes de septiembre de 2026. Esta misión será la primera vez en que unos seres humanos aterrizan cerca del Polo Sur lunar. La misión durará unos 30 días. La nave nodriza se pondrá en órbita a la Luna. Dos de los astronautas descenderán en un vehículo a la superficie de nuestro satélite natural, donde pasarán una semana explorando la zona. Luego volverán a la nave nodriza, donde se reunirán con sus otros dos compañeros y juntos regresarán a la Tierra.
La región lunar que será explorada en esta misión posee unas características muy distintas a las de todas las zonas de la Luna visitadas por astronautas durante el programa Apolo.
Por estar tan cerca del Polo Sur lunar, los astronautas verán sombras espectaculares, de 25 a 50 veces más largas que los objetos que las proyecten, debido a que la luz solar golpea la superficie allí en un ángulo bajo, por estar el Sol a solo unos pocos grados por encima del horizonte.
Otro efecto será que los astronautas no verán la salida ni la puesta del Sol. En vez de eso, lo verán flotar cerca del horizonte mientras se desplaza horizontalmente por el cielo.
Debido a que la luz solar en el Polo Sur de la Luna incide en la superficie horizontalmente, roza los bordes de los cráteres, pero no siempre alcanza sus fondos. Las partes más hondas de algunos cráteres profundos no han visto la luz del día desde hace miles de millones de años, por lo que las temperaturas en tales puntos pueden llegar a ser de hasta 170 grados centígrados bajo cero. Eso es casi tres veces más frío que la temperatura más baja registrada en la Antártida. El efecto opuesto, el experimentado por los puntos expuestos de manera permanente a la luz solar directa, como los bordes de los cráteres, pueden alcanzar temperaturas de más de 50 grados centígrados.
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Recreación artística de astronauta del programa Artemis examinando la superficie lunar. (Imagen: NASA)
Artemis 4 será una misión más ambiciosa aún, encabezada por la colocación de una estación espacial, la Gateway, en órbita a la Luna.
Los primeros elementos de la estación pasarán aproximadamente un año viajando hasta la órbita lunar, mediante propulsión iónica de alta eficiencia y ayudándose de la gravedad de la Tierra, la Luna y el Sol para llegar a su destino. La propulsión iónica, aunque de aceleración muy lenta, consume solo una ínfima parte del combustible gastado por los cohetes tradicionales de propulsión química.
Con el acoplamiento del módulo I-Hab (International Habitation module), suministrado por la Agencia Espacial Europea (ESA), la Gateway estará lista para acoger a sus primeros inquilinos humanos.
I-Hab ampliará el lugar donde los astronautas de Gateway vivirán, trabajarán, llevarán a cabo actividades científicas pioneras y se prepararán para sus misiones en la superficie lunar. I-Hab también incluye los sistemas críticos de soporte vital proporcionados por la JAXA (la Agencia Espacial Japonesa) para permitir estancias más prolongadas a bordo de la Gateway.
Antes del lanzamiento de la tripulación y del I-Hab con el cohete SLS, dos naves adicionales serán posicionadas para participar en la misión: La SHLS (Starship Human Landing System) de SpaceX, que transportará los trajes espaciales de nueva generación para los paseos lunares, y el módulo logístico Dragon XL de SpaceX, que llevará experimentos científicos y otros suministros para la misión. Una Starship mejorada aportará a la misión Artemis 4 capacidades ampliadas, incluyendo la de poder acoplarse fácilmente con la Gateway.
Tras varios días realizando las comprobaciones iniciales a bordo de la Gateway y preparándose para la expedición a la superficie, dos miembros de la tripulación entrarán en la Starship y esta se desacoplará de la estación, culminando ello con una estancia de ambos astronautas de unos seis días en la superficie lunar. Los otros dos astronautas permanecerán en la Gateway para continuar con investigaciones y supervisar las actividades en la superficie.
Al igual que en Artemis 3, los astronautas que desciendan a la superficie lunar realizarán varios paseos lunares e investigarán la zona alrededor del punto de alunizaje. (Fuente: NCYT de Amazings)



