Física
El estado exótico en que el óxido de níquel se vuelve un conductor eléctrico
Se ha descubierto cuáles son las condiciones bajo las cuales el óxido de níquel puede convertirse en un metal conductor de la electricidad.
Los físicos han predicho durante décadas que el óxido de níquel, bajo una compresión adecuada, dejaría de comportarse como un compuesto aislante, que no conduce la electricidad, para pasar a actuar como un metal conductor.
Sin embargo, las predicciones al respecto no habían podido ser confirmadas anteriormente.
Unos científicos del Instituto Carnegie de Ciencia, en Washington, D.C., han determinado ahora que el compuesto se convierte en un metal conductor de la electricidad bajo enormes presiones, del orden de 2,4 millones de veces la presión atmosférica.
El equipo de Viktor Struzhkin y Alexander Gavriliuk puso muestras delgadas, con un grosor no mayor de una micra, en una celda de yunque de diamante diseñada con este propósito.
Los investigadores consiguieron hacer mediciones lo bastante precisas y fiables como para poder determinar que la disminución de la resistencia eléctrica del óxido de níquel empieza a 1,3 millones de atmósferas (130 gigapascales).
A 2,4 millones de atmósferas, se registró una espectacular disminución, de tres órdenes de magnitud, en la resistencia eléctrica, lo que indica un cambio claro desde un estado semiconductor a uno conductor de la electricidad.