Astroquímica y astrobiología
Carbono intergaláctico en nuestros cuerpos
El carbono de nuestros cuerpos no solo proviene del espacio interestelar sino que, además, según un nuevo estudio, probablemente viajó por el espacio intergaláctico.
La vida en la Tierra no podría existir sin carbono. Pero el propio carbono no podría existir sin las estrellas. Casi todos los elementos químicos, excepto el hidrógeno y el helio, deben su actual presencia en el universo a que fueron forjados en estrellas y posteriormente arrojados al cosmos cuando estas murieron. En un acto supremo de reciclaje galáctico, los planetas como el nuestro se forman incorporando estos átomos estelares a su composición, ya sea el hierro del núcleo de la Tierra, el oxígeno de su atmósfera o el carbono de los cuerpos de los terrícolas.
Un equipo de científicos de Estados Unidos y Canadá ha confirmado recientemente que el carbono y otros elementos químicos formados en las estrellas no permanecen siempre dentro de la galaxia en la que fueron creados. En galaxias como la nuestra, que siguen formando activamente nuevas estrellas, cantidades enormes de átomos de estos elementos químicos realizan un viaje tortuoso que incluye el espacio intergaláctico. Salen de su galaxia de origen y circulan a su alrededor en corrientes gigantes que se extienden por el espacio intergaláctico. Estas corrientes, en lo que se conoce como el medio circungaláctico, se asemejan a gigantescas cintas transportadoras que empujan material hacia el exterior y lo arrastran de vuelta al interior galáctico, donde la gravedad y otras fuerzas pueden usar estas materias primas en formar planetas, lunas, asteroides, cometas e incluso nuevas estrellas.
“El medio circungaláctico es como una gigantesca estación de tren: Constantemente envía cargamentos hacia fuera y hacia dentro”, explica Samantha Garza, de la Universidad de Washington en la ciudad estadounidense de Seattle, y coautora del estudio. Los elementos químicos pesados fabricados en las estrellas son empujados fuera de su galaxia anfitriona y hacia el medio circungaláctico mediante las explosiones de tipo supernova en las que tales estrellas mueren. Pero luego, allí fuera, pueden ser atraídos de nuevo, reingresar en la galaxia y continuar el ciclo de formación de estrellas y planetas.
Sector del espacio intergaláctico con la galaxia JO175 en el centro. (Foto: ESA / Hubble / NASA / M. Gullieuszik / GASP team)
En 2011, un equipo de científicos confirmó por primera vez la teoría de que las galaxias con una actividad de formación estelar significativa como la nuestra están rodeadas por un medio circungaláctico, y que esta gran nube de material en circulación incluye gases calientes enriquecidos con oxígeno. Garza y sus colegas han descubierto ahora que el medio circungaláctico de las galaxias con una actividad de formación estelar significativa también hace circular materiales a temperaturas más bajas, incluido el carbono.
Las implicaciones de este fenómeno son apasionantes, en palabras de Jessica Werk, de la citada universidad y coautora del estudio. “¡Es muy probable que el carbono de nuestros propios cuerpos haya pasado una cantidad significativa de tiempo fuera de la galaxia!”.
El estudio se titula “The CIViL* Survey: The Discovery of a C iv Dichotomy in the Circumgalactic Medium of L* Galaxies”. Y se ha publicado en la revista académica The Astrophysical Journal Letters. (Fuente: NCYT de Amazings)