Psicología
Métodos basados en evidencia para mejorar la memoria en época de exámenes
Conservar la salud de la memoria es primordial, principalmente si aun estas en el proceso de aprendizaje académico. Al comenzar los exámenes para aprobar el curso los estudiantes buscan métodos rápidos y prácticos para retener toda la información y salir victoriosos en su carrera académica.
Sin embargo, las estrategias implementas no son respaldadas por la ciencia, por lo que el resultado del esfuerzo es agotador y poco efectivo. Lo ideal es tener un tiempo invertido con un rendimiento académico optimo. En este sentido, no solo se deben usar herramientas tecnológicas como el detector de plagio, que permite resumir e identificar las similitudes de los textos durante la formación y compresión de los contenidos.
La combinación de recursos digitales y personales educa la memoria a tener un mejor desempeño académico.
La importancia de usar métodos respaldados por la ciencia
Diferentes estudios sobre la psicología cognitiva han demostrado que implementar una estrategia de estudio no siempre tiene el mismo impacto en la consolidación de la memoria.
Contar con métodos comunes como la relectura pasiva o el subrayado indiscriminado ofrece una falsa sensación de aprendizaje. Esto genera familiaridad con el texto, pero a largo plazo no asegura su retención.
Por el contrario, existen otras técnicas con respaldo empírico que ayuda a recordar la información y aplicarla en otros textos.
Técnica de evocación activa
Utilizar la técnica de evocación activa permite poner a prueba la prueba sin contar con un apoyo. Esta técnica se basa en escribir lo aprendido y luego responder preguntas sin tener que volver a visualizar el material de estudio.
Aplicar esta técnica fortalece las conexiones neuronales y la información aprendida no se olvidará tan fácilmente. Además, si el estudiante establece esta práctica como una simulación del examen se sentirá en confianza y por consecuencia su ansiedad disminuirá.
Repetición espaciada
Memorizar de manera intensiva en una sola jornada suele ser ineficaz. Hacer repeticiones espaciada propone estudiar en intervalos progresivos, por ejemplo, primero se debe hacer al día siguiente, seguidamente a los tres días y finalmente después de la semana. Este ciclo se repite y es una técnica para no agotar la memoria rápido.
Este sistema se basa en la curva del olvido de Ebbinghaus, el estudio indica que al no existir un esfuerzo la información se desvanece con prontitud. Entonces, al estudiar con repeticiones espaciadas se refuerza la huella de memoria y facilita que el contenido quede en la memoria por largo tiempo.
Elaboración y asociación de ideas
Utilizar la técnica de elaboración le permite al estudiante preguntarse como el material de estudio se relaciona con lo que ya conoce. Conocer a profundidad la información en vez de repetir datos permite una integración de significados.
Asociar ideas mediante analogías, esquemas o mapas conceptuales también mejora la retención, porque permite visualizar las conexiones entre los temas y recordar de forma más estructurada.
Técnica de la práctica intercalada
Estudiar un solo tema durante horas puede generar monotonía y poca eficiencia. La práctica intercalada propone alternar entre materias o tipos de problemas. Cuando el estudiante se concentra en un solo tema el cerebro termina agotado y a su vez la memoria no almacena correctamente la información, lo que provoca estrés o ansiedad.
Por tal motivo, se recomienda intercalar los temas de estudios, establecer una agenda, bien sea por día o por horas, así se incrementará la flexibilidad cognitiva. Asimismo, el estudiante tendrá mayor habilidad para aplicar los conocimientos en otro contexto.
Higiene del sueño y memoria
Tener una memoria saludable no dependerá únicamente de las técnicas de estudios, sino también en los factores biológicos. Por tal motivo, en época de exámenes el estudiante debe dormir adecuadamente, ya que tener sueño profundo consolida la información adquirida en el día.
Diversos estudios certifican que tener un mal descanso reduce la capacidad de atención, limita la memoria y afecta la concentración. En este sentido, lo ideal es que se respeten los horarios de sueño regular para tener éxito durante los exámenes.
Estrategias de regulación emocional
Las emociones tienen un papel crucial durante la época de exámenes. Sufrir de ansiedad o estrés puede bloquear la memoria a pesar que hayas dedicado horas de estudios. Una forma muy efectiva para evitar un episodio de ansiedad es la técnica de respiración consciente, pausas activas y meditación.
Al tener estas prácticas el cuerpo las recibe como una regulación al estrés, así el cerebro lo procesa y se recupera mejor la información aprendida para presentar el examen.
La importancia de la alimentación y el ejercicio físico
Para conservar la memoria saludable el cerebro necesita energía y nutrientes para funcionar correctamente. Tener una dieta equilibrada que incluya ácidos grasos omega-3, proteínas, verduras y frutas mejora la atención y la memoria.
De igual manera, el ejercicio físico estimula la circulación sanguínea y la neurogénesis para mejorar la capacidad de aprender. Una excelente técnica es tener caminatas cortar que potencie la concentración y libera los estreses asociados al periodo de exámenes.
Mejorar la memoria no depende de la aplicación de recetas milagrosas, técnicas científicas o prácticas personales. Lo ideal es tener una aplicación coherente a los métodos funcionales y que se acerquen a tu método de aprendizaje. Como son cada una de estas técnicas y herramientas tecnológicas útiles como el detector de plagio para almacenar de forma correcta todo el contenido a estudiar.