Ecología
Biofouling: el desafío silencioso que amenaza a los océanos, la industria marítima y la salud global
El biofouling —también conocido como ensuciamiento biológico— es un fenómeno natural que, aunque a menudo pasa desapercibido, tiene un enorme impacto económico, ambiental y sanitario. Se trata de la acumulación de microorganismos, algas, pequeños crustáceos y otros organismos vivos sobre superficies sumergidas en ambientes acuáticos, como cascos de barcos, plataformas petroleras, tuberías, boyas o incluso dispositivos médicos.
¿Qué es exactamente el biofouling?
El biofouling ocurre cuando microorganismos como bacterias y diatomeas se adhieren a una superficie y forman una biopelícula. Esta capa inicial facilita que organismos mayores —como balanos, mejillones y algas— colonicen el área. Con el tiempo, la superficie queda cubierta de vida marina no deseada, lo que provoca múltiples problemas.
Impacto económico en la industria marítima
Uno de los sectores más afectados por el biofouling es el marítimo. La acumulación de organismos en los cascos de los barcos aumenta la fricción con el agua, lo que se traduce en:
-Mayor consumo de combustible (hasta un 40 % más en algunos casos).
-Aumento de las emisiones de CO₂ y otros contaminantes.
-Costos adicionales de limpieza y mantenimiento.
Según la Organización Marítima Internacional (OMI), el biofouling genera pérdidas de miles de millones de dólares al año en el transporte marítimo mundial.
(Foto: Wikimedia Commons)
Riesgos ambientales y ecológicos
El biofouling no solo afecta a la economía, también representa una amenaza ambiental. Al viajar en barcos, los organismos adheridos pueden ser transportados a nuevos ecosistemas y convertirse en especies invasoras. Este fenómeno altera la biodiversidad local y puede desplazar a especies autóctonas, con graves consecuencias para los ecosistemas marinos.
Biofouling y salud pública
Más allá del mar, el biofouling también afecta a la salud humana. En dispositivos médicos como catéteres, marcapasos o prótesis, las biopelículas microbianas pueden provocar infecciones resistentes a antibióticos. Esto lo convierte en un problema sanitario de alcance mundial.
Estrategias y tecnologías para combatirlo
El control del biofouling es un campo activo de investigación científica. Entre las principales soluciones se encuentran:
-Recubrimientos antifouling: pinturas especiales que liberan sustancias para evitar la adhesión de organismos.
-Tecnologías ecoamigables: recubrimientos basados en nanotecnología, polímeros no tóxicos y superficies biomiméticas inspiradas en la piel de tiburón.
-Limpieza robótica submarina: sistemas automatizados que eliminan la acumulación sin dañar la superficie.
La tendencia actual busca soluciones sostenibles, ya que algunos recubrimientos tradicionales contienen compuestos químicos dañinos para el medio ambiente.