Entomología
¿Cómo se convierte una abeja obrera en abeja reina?
¿Qué hace que una abeja obrera se convierta en abeja reina? Esta pregunta, aparentemente sencilla, esconde uno de los fenómenos biológicos más fascinantes del mundo animal. En el interior de una colmena, miles de abejas comparten prácticamente el mismo ADN, pero solo una llegará a ser reina. La diferencia no está en la genética, sino en algo mucho más cotidiano —y extraordinario a la vez—: la dieta.
Una colmena, un solo ADN… y dos destinos muy distintos
Las abejas melíferas (Apis mellifera) presentan un sistema de castas muy definido:
-Abeja reina, encargada de la reproducción.
-Abejas obreras, responsables del mantenimiento de la colmena.
-Zánganos, cuya función es fecundar a la reina.
Lo sorprendente es que las larvas que darán lugar a reinas y obreras son genéticamente idénticas. No existe un “gen de la reina”. Entonces, ¿qué marca la diferencia?
La jalea real: el alimento que lo cambia todo
La clave de la transformación está en la alimentación durante la fase larvaria.
Todas las larvas reciben jalea real durante sus primeros días de vida. Sin embargo:
-Las larvas obreras pasan pronto a una dieta de polen y néctar.
-Las larvas seleccionadas para ser reinas reciben jalea real en exclusiva y de forma continua.
La jalea real es una sustancia rica en proteínas, lípidos, vitaminas y compuestos bioactivos. No es solo un alimento energético: actúa como un potente regulador del desarrollo.
![[Img #77605]](https://noticiasdelaciencia.com/upload/images/12_2025/9871_bees-292132_1280.jpg)
Epigenética: cuando la dieta activa o apaga genes
Aquí entra en juego un concepto fundamental en biología moderna: la epigenética.
La jalea real no cambia el ADN de la abeja, pero sí modifica la forma en que ciertos genes se expresan. En concreto:
-Inhibe enzimas que silencian genes relacionados con el crecimiento y la fertilidad.
-Activa rutas hormonales que permiten el desarrollo completo de los ovarios.
-Provoca cambios en el tamaño corporal, la longevidad y el metabolismo.
Gracias a estos cambios, la futura reina:
-Vive hasta 5 años, frente a las pocas semanas de una obrera.
-Desarrolla ovarios funcionales.
-Se convierte en el centro reproductivo y químico de la colmena.
¿Quién decide qué larva será reina?
No es una decisión individual, sino colectiva.
Las abejas obreras detectan cuándo la colmena necesita una nueva reina —por ejemplo, si la actual envejece o muere— y seleccionan varias larvas jóvenes. A estas larvas las alimentan exclusivamente con jalea real y las alojan en celdas reales, más grandes y verticales.
Es un ejemplo extraordinario de inteligencia colectiva y organización social.
Más que abejas: un modelo para la ciencia
El caso de la abeja reina es estudiado en laboratorios de todo el mundo porque ofrece pistas clave sobre:
-El envejecimiento
-La regulación genética
-La influencia de la nutrición en el desarrollo
-La epigenética en animales complejos
Entender cómo una simple diferencia en la dieta produce cambios tan drásticos ayuda a los científicos a explorar mecanismos similares en otros seres vivos, incluidos los humanos.

