Astronáutica
Gran Enciclopedia de la Astronáutica (72): Navaho
Navaho
Misil; País: EEUU; Nombre nativo: Navaho
Inmediatamente después de la Segunda Guerra Mundial, los militares estadounidenses tenían sobre la mesa dos posibles tipos de misil para alcanzar sus objetivos de ataque nuclear a distancias intercontinentales. Uno era el misil balístico, y el otro el misil crucero. El primero despegaría y seguiría una ruta parabólica en dirección a su meta. El segundo, en cambio, seguiría una ruta mucho más parecida a la de un avión, alcanzando velocidades no tan elevadas.
Antes de que Estados Unidos se decidiera por el desarrollo de misiles balísticos intercontinentales, como el Atlas o el Titan, apostó por los misiles cruceros. El SM-64 Navaho fue uno de los más interesantes, porque de su imponente sistema de propulsión descenderían posteriormente motores que se emplearían en cohetes espaciales.
El primer objetivo en 1946 fue desarrollar un misil que doblara el alcance de las V-1 alemanas, las famosas bombas volantes. Para ello se inició el programa MX-770, que desembocó en diversos estudios que contemplaban alcances de más de 5.000 Km. El secreto estaría en utilizar motores cohete para el empuje inicial y ramjet para la fase de crucero.
En julio de 1950 se dio la orden para iniciar el desarrollo de un misil crucero con esta tecnología que pudiera transportar una bomba atómica a hasta 8.900 Km de distancia, es decir, capaz de alcanzar la URSS. El programa se llamaría WS 104A, y sería subdividido en tres subprogramas. El primero debía desarrollar el misil X-10 para pruebas de la tecnología que debería aplicarse en los otros dos. El segundo se llamaría Navaho II (XSSM-A-4 o G-26), y consistiría en un cohete que se lanzaría de forma vertical, al cual estaría unido el misil crucero con la carga explosiva. El cohete o acelerador llevaría al misil hasta los 15 Km de altitud y una velocidad de Mach 3, a partir de la cual entraría en funcionamiento este último hasta llegar al destino. En cuanto al tercer subprograma, llamado XSM-64A o G-38, consistiría en un Navaho de mayores dimensiones y diversas tecnologías mejoradas.
El sistema G-26 acabó siendo probado en varias ocasiones, desde Cabo Cañaveral, entre noviembre de 1956 y 1958, y cosechó una nutrida lista de fallos, aunque también algunos aciertos. Este comportamiento, y la pujanza del misil Atlas, hicieron que se decidiera su cancelación el 13 de julio de 1957. A pesar de todo, sus sistemas de propulsión serían esenciales para dotar a los misiles balísticos con los motores adecuados, y su diseño sirvió como punto de partida para otro misil crucero, el Hound Dog.
Debido al primitivo estado de la tecnología de motores cohete, el punto de partida de los utilizados en el acelerador del Navaho estuvo en los del misil alemán V-2. Dos de ellos se emplearon en las primeras pruebas realizadas en 1947. Después éstos fueron sustituidos por versiones americanas mejoradas (XLR-41-NA-1), y en 1951 entró en servicio otro modelo aún mejor, el XLR-43-NA-1. El motor siguió evolucionando hasta que el llamado XLR-71-NA-1 fue seleccionado para ser usado en el modelo operativo del Navaho. Versiones de estas plantas propulsoras equiparían más adelante a los misiles intercontinentales americanos.
El acelerador del Navaho medía unos 23 metros de largo, y 21 el misil. Este último tenía unas alas con una envergadura de casi 9 metros. El primero tenía un motor XLR71-NA-1, construido por la compañía North American, de combustible líquido, que desarrollaba 1.070 kN de empuje. En cuanto al misil, llevaba dos motores ramjet Wright XRJ47-W-5, de 36 kN de empuje cada uno. El misil viajaba colgado del acelerador, hasta que era soltado por éste. El conjunto pesaba unas 61 toneladas, sin carga nuclear.
En total, se lanzaron 11 misiles Navaho, desde el 6 de noviembre de 1956 hasta el 18 de noviembre de 1958. Ninguno de ellos tuvo un comportamiento normal.