Neurología
Cómo el peso de la placenta influye en el cerebro del bebé al nacer y años después
Se ha descubierto la primera evidencia que vincula diferencias de grado de actividad entre los hemisferios izquierdo y derecho del cerebro, con el tamaño del bebé al nacer y el peso de la placenta. El hallazgo podría proporcionar nuevos y esclarecedores datos sobre las causas de ciertos problemas de salud mental que aparecen posteriormente.
La investigación, llevada a cabo por especialistas de la Universidad de Southampton y el Consejo de Investigación Médica en el Reino Unido, revela que los niños que nacieron con tamaño pequeño y que durante la gestación contaron con placentas relativamente grandes, mostraron más actividad en el lado derecho del cerebro que en el izquierdo. Este patrón de actividad cerebral ha sido vinculado con trastornos del estado de ánimo como la depresión.
El estudio se suma a un creciente conjunto de pruebas que muestra que los entornos adversos afrontados por los fetos durante el embarazo (reflejados a menudo por un menor tamaño al nacer y por un mayor tamaño de la placenta) pueden causar cambios a largo plazo en la organización del cerebro.
En la manera en que se crece antes de nacer influyen muchas cosas, incluyendo lo que come la madre durante el embarazo y la cantidad de estrés que experimenta, tal como explica el Dr. Alexander Jones. Esto puede tener repercusiones en la salud mental y física del hijo o hija incluso años después.
Ésta es la primera vez que se consigue vincular el crecimiento del feto antes del parto con la actividad cerebral que la persona resultante tiene bastantes años más tarde. El equipo de investigación espera que lo descubierto en este estudio ayude a esclarecer por qué ciertas personas son más propensas a enfermedades como la depresión, sin que concurran los factores de riesgo conocidos.