Microbiología
Descubren una similitud del virus del Ébola y del VIH con virus que infectan a arqueas
Se ha descubierto que virus como el VIH y el del Ébola comparten un rasgo común con virus que infectan a arqueas termófilas. Y ello pese a la enorme diferencia entre sus respectivos hábitats, y a los 2.000 millones de años de brecha evolutiva entre arqueas y humanos. Ese rasgo común entre virus de dos tipos tan distintos se caracteriza por el hecho de que unos y otros se apoderan del mismo conjunto de proteínas de las células atacadas en un paso clave del ciclo de infección.
En los eucariotas (el grupo que incluye a los vegetales, los animales, los hongos, y todos los demás organismos cuyas células tienen un núcleo definido) y en las arqueas (microorganismos sin un núcleo definido en su construcción celular), los virus se apropian de un grupo de importantes complejos proteicos, conocido como ESCRT (por las siglas del inglés Endosomal Sorting Complexes Required for Transport).
El equipo de Steve Bell, de la Universidad de Indiana en Bloomington, y Mark J. Young, de la Universidad Estatal de Montana, en Estados Unidos ambas entidades, estaban investigando al virus STIV, el cual infecta a la Sulfolobus solfataricus, una especie de arquea que vive en aguas termales de zonas volcánicas como el Parque de Yellowstone. Estas arqueas termófilas destacan por poder vivir en ambientes extremadamente calientes, que matarían de inmediato a muchas otras formas de vida del planeta.![[Img #14400]](upload/img/periodico/img_14400.jpg)
Entonces, los investigadores hallaron que, tal como ocurre con una gama de virus que infectan a los humanos, el STIV también se sirve de la maquinaria del conjunto proteico ESCRT de su víctima para completar su ciclo vital.
El hecho de que uno y otro tipo de virus compartan esta característica respalda la idea de que el conjunto proteico ESCRT es muy antiguo y que debió surgir en un punto de la evolución anterior a cuando las arqueas y los eucariotas se separaron para ser dos dominios distintos de vida. Los científicos datan la aparición de las arqueas en aproximadamente hace 3.700 millones de años, mientras que los fósiles más viejos de eucariotas datan de hace 1.700 millones de años.
En la investigación también han trabajado Jamie C. Snyder y Susan K. Brumfield de la Universidad Estatal de Montana, y Rachel Y. Samson de la Universidad de Indiana.
Información adicional



