Química
La futura revolución tecnológica de los tintes permanentes para cabello
El progreso tecnológico puede que sea rápido en muchas áreas, pero en un campo mundano apenas ha experimentado avances durante los últimos 150 años. Ese campo es el de la tecnología básica para teñir el cabello de forma permanente. Ésta es la conclusión de un análisis de casi 500 artículos técnicos y patentes sobre la química de los tintes permanentes de cabello. Sin embargo, dicho análisis también ofrece datos que permiten pronosticar que habrá muchas e importantes innovaciones en los próximos años, incluyendo el desarrollo de tintes de mayor duración y aspecto más natural, así como terapias genéticas para revertir el encanecimiento.
Tal como recalcan Olivier Morel y Robert Christie de la Universidad Heriot-Watt en Edimburgo, Reino Unido, los tintes para el cabello ya constituyen una industria internacional multimillonaria, abocada a una expansión aún mayor en el futuro debido al aumento de la expectativa de vida de una población mundial que anhela mantener una apariencia juvenil.
Sin embargo, la mayoría de las tecnologías de tintes permanentes para el cabello se basan en un enfoque de 150 años de antigüedad que utiliza PPD, una sustancia química que produce tonos castaños y oscuros cuando se expone al aire. Las preocupaciones sobre la seguridad para la salud del uso habitual del PPD y de otros ingredientes de tintes para el cabello, y la demanda de métodos para teñirlo que sean más cómodos, han propiciado un auge en la investigación sobre nuevos tintes y tecnologías alternativas.
Los científicos están progresando hacia esas metas.
Por ejemplo, entre las futuras técnicas para teñir el cabello se incluyen colorantes compuestos por pigmentos a base de partículas de tamaño nanométrico que penetrarán en el pelo y quedarán atrapados en él con mayor eficacia, proporcionando un color más duradero.
Los científicos también están desarrollando sustancias que estimulen genes específicos para que produzcan melanina, el pigmento que da color al cabello. Estas sustancias prometen producir una gama más amplia de colores con apariencia más natural, desde el rubio al castaño oscuro y el negro, siendo mejores las perspectivas de obtener resultados más naturales y menos probable que surjan preocupaciones sobre la toxicidad.