Entomología
En algunas especies de avispas hay más diferencias anatómicas de lo creído entre reina y obreras
Las avispas de castas diferentes dentro de una colonia no difieren mucho genéticamente. Las diferencias que surgen entre ellas son más bien una consecuencia de la influencia de ambientes distintos en el desarrollo de sus cerebros.
El equipo de Sean O’Donnell, de la Universidad Drexel de Filadelfia, Estados Unidos, ha comprobado que, en las avispas reina, las regiones cerebrales encargadas del procesamiento de la información visual son más pequeñas que las regiones equivalentes en el cerebro de las obreras de sus mismas colonias. El patrón se mantiene en la mayoría de las 12 especies estudiadas de avispas cartoneras.
Muchas otras investigaciones previas sobre cómo el ambiente en el que se desenvuelven los animales afecta a su sistema nervioso (una especialidad científica conocida como neuroecología) se han basado en comparaciones entre los cerebros de diferentes especies, con estilos de vida y comportamientos distintos, como por ejemplo al comparar aves diurnas con aves nocturnas.
![[Img #18074]](upload/img/periodico/img_18074.jpg)
Las fuertes diferencias ecológicas y conductuales entre individuos dentro de una misma colonia de insectos, constituyen un punto de referencia muy útil para estudiar cómo aparecen las diferencias cerebrales entre individuos de una misma especie y cuál es su relevancia funcional.
A las avispas cartoneras se las llama popularmente de este modo o con nombres parecidos debido al material con el que construyen su nido, una especie de cartón o papel que elaboran masticando corteza de árbol y mezclando la celulosa con su saliva.
Información adicional