Entomología
¿Cómo andar sin patinar pero tampoco sin adherirse al suelo cuando se es un insecto palo?
El equipo de David Labonte, del Departamento de Zoología de la Universidad de Cambridge en el Reino Unido, ha comprobado que los insectos palo tienen, al final de sus patas, unas almohadillas especializadas, “diseñadas” para producir grandes cantidades de fricción con muy poca presión. Cuando están derechos, los insectos palo no se pegan realmente, sino que aprovechan una fricción muy poderosa para asegurarse de que se agarran con firmeza sin la necesidad de despegarse del suelo cuando se mueven.
En un estudio anterior, del año pasado, el equipo descubrió que los insectos palo tienen dos tipos diferentes de almohadillas: las almohadillas adhesivas que se podrían definir en algunos aspectos como almohadillas de dedos, y que están al final de las patas, y almohadillas de otro tipo, que no son pegajosas, y que se podrían describir en algunos aspectos como almohadillas de talón.
El insecto utiliza diferentes almohadillas dependiendo de la dirección y el terreno.
Estudiando las “almohadillas de talón” con mayor detalle, los investigadores descubrieron que los insectos han desarrollado una forma de generar una enorme fricción cuando caminan derechos. Lo hacen a través de un sistema de diminutos pelos que usan combinaciones de altura y curvatura para crear una “jerarquía” del agarre, en la que la presión más ligera genera una fricción muy fuerte, permitiendo a los insectos palo agarrarse pero no pegarse.
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Imagen, obtenida por microscopía electrónica de barrido, que muestra las protuberancias cónicas, de tamaño micrométrico, que, en la zona tarsal, cubren la superficie de las almohadillas de talón de algunos insectos cuyos pies tienen la capacidad de adherirse a superficies. (Imagen: David Labonte y Adam Robinson)
Las almohadillas peludas de fricción del insecto palo emplean tres estrategias principales para permitir que el área de contacto se incremente rápidamente bajo presión, creando una escala o “jerarquía” del agarre sin ninguna clase de pegado:
-Algunos pelos son más cortos que otros, así que, cuanta más presión, más pelos entran en contacto con la superficie.
-Cuando se aplica aún más presión, algunos de los pelos se tuercen y hacen contacto lateral, incrementando grandemente el área de contacto con muy poca fuerza extra.
Estas características de diseño se combinan eficazmente para generar grandes cantidades de fricción a partir de cantidades de presión comparativamente diminutas por parte del insecto.
Lecciones de la naturaleza como ésta podrían ser también útiles para inspirar nuevas formas de crear dispositivos artificiales.
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