Botánica
Hojas de árbol, químicamente alteradas por la sequía, haciendo estéril la tierra donde caen
Las condiciones ambientales cada vez más típicas en ciertas zonas del mundo por culpa del calentamiento global, y que se caracterizan por una mayor sequedad y temperaturas más altas, pueden promover una serie de alteraciones químicas en las hojas de los árboles, según los resultados de un estudio. Además, y esto es lo más preocupante, los cambios químicos sufridos por dichas hojas podrían reducir la presencia de nutrientes en el suelo donde caigan.
Jeff Dukes, profesor de Silvicultura y Recursos Naturales en la Universidad Purdue, ha comprobado que las hojas de arce rojo acumulan cerca del doble de tanino cuando quedan expuestas a condiciones de calor y sequía.
Las sustancias de esta clase, que defienden a las hojas contra herbívoros y patógenos, interfieren con la función de enzimas comunes en el suelo.
Esto sugiere que cuando estas hojas caen, pueden ralentizar procesos bioquímicos del suelo como la descomposición y el ciclo de nutrientes. Esto podría, a su vez, afectar de modo negativo al crecimiento vegetal y a la absorción de nutrientes.
La cascada de efectos implica, por tanto, que el calentamiento global puede dificultar el crecimiento de vegetales bajo ciertas condiciones, a través del fenómeno descrito. Éste se une a otros que ya han sido pronosticados como consecuencias negativas del calentamiento global sobre el crecimiento vegetal.
El nuevo hallazgo se ha hecho en una línea de investigación de la Universidad Purdue consistente en exponer a vegetales de distintas parcelas a varios escenarios climáticos futuros utilizando calefacción y otros medios para controlar las condiciones.